Hace unas semanas, las redes sociales en Colombia convulsionaron por un supuesto perdón que había pedido el ex presidente Juan Manuel Santos en la autodenominada Comisión de la Verdad. Días después de aquel show mediático, La autodenominada Comisión de la Verdad, dio a conocer a la opinión pública que las FARC en los próximos días también pedirían “perdón” por sus secuestros.
Hace unas semanas, las redes sociales en Colombia convulsionaron por un supuesto perdón que había pedido el ex presidente Juan Manuel Santos en la autodenominada Comisión de la Verdad. Días después de aquel show mediático, La autodenominada Comisión de la Verdad, dio a conocer a la opinión pública que las FARC en los próximos días también pedirían “perdón” por sus secuestros.
Aunque a la luz de algunos ciudadanos incautos, estos actos de “perdón” son de la máxima importancia, al revisar el fondo se pueden encontrar las pruebas suficientes para afirmar que más que perdón, lo que están haciendo es una estrategia mediática desde la cual pretenden deconstruir la historia del país y darle visibilidad a uno de los presidentes más nefastos que ha tenido Colombia. Todo, con miras a tomarse el poder.
Por un lado, el supuesto perdón de Santos, no trajo mayor ganancia para la reparación a las víctimas, o para la reconciliación del país. Por el contrario, sus declaraciones fueron de odio, atacando siempre al ex presidente Uribe y a quiénes en su momento le pidieron a Juan Manuel, no entregarle el país a las FARC y al narcotráfico. Tal fue el caso, que en los días posteriores, tanto el ex presidente Uribe, como el ex Ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, tuvieron que desmentir en los medios, las afirmaciones de Santos. En ese acto de “perdón”, no existió otra cosa más que estrategia política y generación de odio, de cara a las elecciones del 2022.
Por otro lado, está el acto mediático de “perdón” de las FARC. El acto está programado para el día de hoy, 23 de junio, y el micrófono lo tendrán alias “Timochenko”, alias “Losada” y alias “Pastor Alape”. Desde ya, se puede asegurar que simplemente pedirán perdón por los secuestros que ya todos conocemos, no brindarán nueva información, ni nada por el estilo. Lo anterior, con el objetivo de mejorar su imagen y favorabilidad en la población colombiana. De igual manera, es probable que aprovechen tener la palabra, para echar culpas al estado y a nuestras Fuerzas Armadas, de modo que puedan seguir en su misión de cambiar la historia del país. Una historia en la que ellos pasan de villanos, a héroes del pueblo colombiano
Y aunque aseguran que los 3 cabecillas admitirán su responsabilidad por los secuestros, se debe recordar que en la autodenominada Comisión de la Verdad no se juzgará a nadie, ni se compulsarán copias a la ilegítima JEP, para que sean juzgados. De esta manera, harán creer a los colombianos que ellos ya admitieron su responsabilidad, y seguirán quedando impunes sus miles de crímenes.
Pero quien hace propicio todo este escenario mediático, es la autodenominada comisión de la verdad. En cabeza del Padre De Roux, la mal llamada Comisión de la Verdad, abre los espacios necesarios, para que las FARC limpien sus crímenes y que Juan Manuel Santos, siga ganando adeptos con mentiras y manipulación. Allí, les interesa que el estado quede como el gran culpable de la violencia que vive Colombia desde inicios del siglo XX, y que las FARC sean presentadas ante los colombianos, como una víctima más del conflicto armado interno. Es por esta razón, que el padre De Roux ha tenido el descaro de felicitar a Juan Manuel Santos, por participar de un show mediático en el que lo único que no se dijo, fue la verdad. Y seguramente, la historia será similar con las FARC.
Si Santos tuviera verdadera voluntad de perdón y reconciliación, pediría perdón a los colombianos, por ignorar la voz del plebiscito y pediría perdón a sus votantes, por traicionar el proyecto por el que votaron en el 2010. Por otro lado, si las FARC tuvieran la misma intención, no solo pedirían perdón, sino que irían ante la justicia para pagar sus más de 100 años que deben de cárcel. Además, delatarían a las milicias urbanas, al mando de alias “Losada”, que tanto daño han hecho al país durante los últimos meses.
Mientras esto no suceda, la autodenominada Comisión de la Verdad, continuará siendo el circo en dónde las FARC y Juan Manuel Santos, siguen sembrando el odio y consolidando su estrategia de tomarse el poder, sin importar los medios.
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