Un audio me despierta en el celular, hoy en las horas de la madrugada, peleando contra mi cotidianidad, escucho entre las tropicales voces de las emisoras Radio Magdalena y Radio Rodadero: "¡Capturado el ex alcalde de Santa Marta Carlos Caicedo Omar! y en los próximos minutos se poducirá la captura del alcalde actual del Distrito de Santa Marta Rafael Alejandro Martínez!". La noticia no puede ser peor, la tristeza no puede ser más inmensa y la rabia no puede ser más profunda.
Una saga de gobiernos, concretamente dos: el ex mandatario Caicedo, que ahora junto a la lidereza y ex concejal de Bogotá Ati Quigua, iría en carrera con su movimiento Fuerza Ciudadana camino a la Presidencia de la República y el alcalde actual Rafael Martínez, elegido por la buena gestión de Caicedo, con una aceptación de la gran mayoría de la población samaria. A diferencia de los gobiernos del Polo y el Petrismo en Bogotá que alimentaron una falsa polarización entre ricos y pobres, y que se dedicaron a repartir en populismo más no en cultura ciudadana los bienes de la ciudad, Caicedo sacaba del letargo social y de la ruina económica a la ciudad más antigua de América. Los pasados Juegos Bolivarianos, la infraestructura vial, mejoramiento del acueducto que fue arrebatado a los corruptos, construcción de la Plaz de Mercado, la primera biblioteca pública, de los CADES callejeros para atender trámites del público cercaa los barrios populares, sacar a Santa Marta de la Ley de Quiebras o 550, son algunas de las muestras de que incluso en la izquierda moderada, si se tiene coherencia y dedicación administrativa seria, se logra lo aparentemente imposible.
Analistas como Gustavo Álvarez Gardeazabal, aciertan hoy al decir que los gamonales corruptos en su mayoría del liberalismo -y otros tantos de familias de rancio abolengo conservadoras olor fornmol-, tiene miedo que ante la falta de credibilidad de una FALSA PAZ, del actual Gobierno y la falta de claridad en la oposición actual, suceda un fenómeno como el del triunfo de Álvaro Uribe Vélez en 2002 a la Presidencia. La derrota del régimen que hablaba Álvaro Gómez Hurtado -aunque muchos descendientes y levantados herederos de ese régimen se proclaman alvaristas y laureanistas-, Carlos Caicedo florecía como una luz en la oscuridad que siempre llega del mar, así como cuando en 1886, el General José María Campo Serrano, firma la Constitución de 1886, que sella el período de institucionalidad, paz y orden de 105 años que forjaron nuestro carácter de Nación. De esa escuela de Unidad de Patria, donde solo existen dos bandos: El de la Ley, el Orden y la Institucionalidad contra el del Delito. Así me educaron, así soy yo.
Desafortunadamente no puedo desplazarme hasta Santa Marta a visitar a las prisiones del régimen, a la politizada Fiscalía General, donde el CTI actúa como Policía Política y de Cheka, de quien tenga intereses desde el poder para callar las voces de quienes quieren dentro de la Ley, el Orden y la Institucionalidad, comunicar ideas, mostrar su trabajo y dejar que el elector decida. Sobran los comentarios de los medios hegemónicos de clasismo, sesgo, prejuicio y caras de desaprobación a un acto de corrupción que no se da. Caicedo y Martínez no mancharon sus manos con sangre, y son tratados como criminales; mientras Timochenko es recibido como gran señor en la principal emisora de radio de Colombia -propiedad del grupo noticioso español PRISA del Partido Socialista Español-. ¿Esto se puede llamar paz y democracia?
Desde el interior del país, desde este humilde, pero cada vez más grande medio independiente EL NODO COLOMBIA, que desde 2016 me brinda la oportunidad de escribir y defender la Constitución, la Ley, el Congreso de la República y la Institucionalidad de Colombia contra el fanatismo religioso, político y las ambiciones de poder de unos cuantos, me alistaré como el padre de mi tío, el Coronel Marceliano Macías frente a su destacamento del Ejército Nacional en Ciénaga, Magdalena en 1928, quienes con el légitimo uso de la fuerzas y las armas de la República combatieron a los golpistas y subversivos que trataron de derrocar un gobierno, con defecto sí, pero constitucional. En 2017, con ese mismo ímpetu, los que seguimos al movimiento de la Fuerza Ciudadana, defenderemos de nuevo, de la forma que sea necesario, la democracia colombiana, y sacaremos del poder el 20 de julio y el 7 de agosto de 2018 a los causantes de los males de la Nación. Disfruten mientras puedan, la guerra apenas comienza.
La banda de los presidentes de Ecuador desde el gobierno del General García Moreno dice: "Dios: Fuente de toda Autoridad. Mí Poder (el del Presidente que tiene la banda) Proviene del Pueblo y Su Constitucón". Con ese respaldo para la Ley, el Orden y la Institucionalidad, los decentes de Colombia hoy abrimos fuego contra este Régimen.
¡Carlos Caicedo Omar Presidente de Colombia!
@armesto1989
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