En las últimas horas, la controvertida alcaldesa de Bogotá, Claudia López, y su Secretario de Seguridad, Hugo Acero, afirmaron que la ola de violencia que se vive actualmente en la localidad del Sumapaz, se debe al enfrentamiento entre frentes activos de las FARC, unos comandados por alias Iván Márquez y otros comandados por alias Gentil Duarte.

En las últimas horas, la controvertida alcaldesa de Bogotá, Claudia López, y su Secretario de Seguridad, Hugo Acero, afirmaron que la ola de violencia que se vive actualmente en la localidad del Sumapaz, se debe al enfrentamiento entre frentes activos de las FARC, unos comandados por alias Iván Márquez y otros comandados por alias Gentil Duarte.

López aseguró que la situación en Sumapaz, generaba bastante preocupación y se debían tomar acciones inmediatas. No obstante, se debe revisar el trasfondo que ha llevado a que en las últimas semanas, 3 asesinatos se presentaran en dicha localidad de Bogotá. 

Por un lado, se debe dejar en claro que la ola de violencia no solo se está viviendo en el Sumapaz, la deficiente administración de la alcaldesa en términos de seguridad, ha llevado a que la violencia haya aumentado en la mayoría de localidades de la ciudad. Es por esto que, en menos de 2 semanas, se han presentado balaceras, que han dejado varias personas muertas, en el norte, centro y sur de la ciudad. Sumapaz no ha sido la excepción y, con seguridad, la falta de gestión y la descoordinación que existe entre las entidades distritales, ha facilitado la ola de asesinatos que se han presentado en la mencionada localidad.

Por otro lado, es necesario recordar que el Sumapaz, la última localidad de la Capital, ha sido históricamente afectada por la violencia ejercida por grupos terroristas con tendencia comunista. Por tanto, no es raro que los frentes activos de las FARC estén buscando, una vez más, tomarse esta localidad, para ejercer influencia desde la Capital de Colombia.

Pero, ¿qué factor es determinante para que las FARC puedan entrar y salir de la localidad en cuestión, sin temor a ser detectados? Como es de común conocimiento, las FARC cuentan desde hace varios años con un brazo político clandestino, el PCCC (Partido Comunista Clandestino Colombiano). Dicho brazo político ha sido el encargado de ejecutar acciones criminales en las principales ciudades del país. Una de las jugadas de las FARC en el Acuerdo de la Habana, fue no comprometerse a delatar y desmovilizar a dicho brazo político. Con esta jugada, aseguraron su presencia y control de algunas zonas en la clandestinidad, de las ciudades más grandes del país. 

Igual sucede con el frente Antonio Nariño, comandado por alias Carlos Antonio Lozada, y con presencia en las zonas urbanas del país. De hecho, este frente tuvo una alta injerencia en el atentado al Club el Nogal de hace algunos años. Si bien alias Lozada hoy es congresista y supuestamente está comprometido con la paz, jamás ha delatado, ni entregado a los hombres del mencionado frente, manteniendo el control que, al igual que el PCCC, tiene en las zonas urbanas.

En últimas, la violencia que hoy vive el Sumapaz, tiene 2 responsables directos. Por una parte, Claudia López y su administración, que han deteriorado significativamente la seguridad en Bogotá. Por otro lado, los cabecillas FARC, que siendo fieles a su estrategia de la combinación de todas las formas de luchas, han dejado intactos a los miembros de sus estructuras urbanas, luego del nefasto acuerdo de La Habana. Mientras López siga al mando de la ciudad y los colombianos sigamos haciéndole el juego a las FARC, la violencia en la Capital continuará.