Gracias al desarrollo de una operación conjunta entre el Ejército, la Fiscalía, la Armada Nacional y la DEA se logró el descubrimiento y posterior destrucción del que sería el mayor complejo cocalero encontrado en el 2020.
El gigantesco complejo complejo de coca estaba ubicado a 10 kilometros del centro urbano más cercano. Las autoridades ubicaron la estructura en una extensión de 1 kilómetro de bosque nativo donde se producían 6 toneladas de coca.
De acuerdo al comunicado emitido por la Fiscalía durante el procedimiento, las autoridades desactivaron un campo minado instalado alrededor de la estructura y fueron incautados insumos líquidos y sólidos, elementos usados para el procesamiento del alcaloide en sus diferentes fases.
El complejo pertenecía a alias “Borojo”, máximo cabecilla de la organización criminal “Guerrillas Unidas del Pacífico” y a alias “Gringo” jefe de las denominadas “Disidencias” de las FARC del Frente “Oliver Sinisterra”.