En las últimas horas, y tras el congreso llevado a cabo por la organización narcocriminal de las FARC, el diario El Espectador, una vez más hace campaña política al recién creado partido político, y trata al terrorista Rodrigo Londoño, alias “Timochenko” como “dirigente político”.

En las últimas horas, y tras el congreso llevado a cabo por la organización narcocriminal de las FARC, el diario El Espectador, una vez más hace campaña política al recién creado partido político, y trata al terrorista Rodrigo Londoño, alias “Timochenko” como “dirigente político”.

La participación de las FARC en los espacios políticos del periódico El Espectador, ha estado marcado por el cubrimiento de amplios espacios en sus principales ediciones. [pullquote]En este caso, cuando aún deben tramitar ante el Consejo Nacional Electoral su personería jurídica como “partido político”, el diario asume su constitución “oficial” llamando al terrorista “Timochenko”, dirigente político.[/pullquote]

Textualmente, el periódico afirma que “En su primer discurso como dirigente político, más que propuestas, habló de las que son las aspiraciones de este nuevo partido. Aun así, reiteró la petición de que el próximo gobierno, sea uno de transición en lo que se refiere a su llegada a la política nacional”.

No obstante, mientras esta organización no cumpla con lo estipulado por ley, en cuanto al trámite para legalizar su participación política, las FARC no podrían ser llamados como “partido político”, situación que se ha ido generalizando a través de las grandes casas editoriales quienes seguirían insistiendo en llamar a terroristas, dirigentes.

Otras casas editoriales como la Revista Semana, otorgaron grandes espacios únicamente dedicados a cubrir el “evento” de las FARC; e incluso transcribiendo “discursos”.

Rodrigo Echeverry Londoño, alias Timochenko o Timoleón Jiménez, Ciudadano colombiano que tiene en su haber más de 32 requerimientos judiciales por los delitos de terrorismo, homicidio, rebelión y lesiones personales. Adicionalmente presenta 162 órdenes de captura por varios delitos y una "circular roja". El Gobierno de Colombia ofrece la suma de $ 2,6 millones de dólares por su captura, mientras que el Departamento de Estado de los Estados Unidos ofrece una recompensa de $ 5.000.000 de dólares por información que conduzca al arresto y/o la condena.