Las diversas manifestaciones que se han presentado ayer, luego de que un grupo de extremistas de izquierda hayan negado el derecho a réplica amparándose en la justificación de ser “víctimas”, no han logrado evidencias las consecuencias reales del quiebre institucional derivado del saboteo. En concreto, la ley orgánica establece taxativamente, que dentro de las actividades que se llevan a cabo en el congreso de la república, existen normativas legales y constitucionales que habilitan el buen funcionamiento de la democracia.

Las diversas manifestaciones que se han presentado ayer, luego de que un grupo de extremistas de izquierda hayan negado el derecho a réplica amparándose en la justificación de ser “víctimas”, no han logrado evidencias las consecuencias reales del quiebre institucional derivado del saboteo. En concreto, la ley orgánica establece taxativamente, que dentro de las actividades que se llevan a cabo en el congreso de la república, existen normativas legales y constitucionales que habilitan el buen funcionamiento de la democracia.

Así, el saboteo realizado ayer por extremistas en el congreso de la república, violando la ley, establece claramente el inicio de un nuevo momento político en Colombia, y pone a la democracia colombiana en cuidados intensivos.

 [pullquote]En concreto, independientemente de las posiciones respecto al derecho que tienen las distintas personas de dar sus opiniones en las actividades establecidas al interior del Congreso de la Republica, es claro que las mismas se rigen conforme a la ley vigente, lo que permite el orden y la legalidad de las mismas. [/pullquote] El reglamento establece adicionalmente que los derechos a replica se realizan inmediatamente, luego de las intervenciones en el hemiciclo, y que le corresponde al moderador o presidente del congreso dar conforme a los términos establecidos el uso de la palabra con carácter inmediato. De esta forma, los procesos de discusión normativa y política en Colombia se han dado prácticamente desde el año de 1992, lo que ha permitido operacionalizar los lineamientos de la Constitución Política Nacional en los procedimientos del senado o la cámara de representantes.

El fenómeno sucedido ayer, en el que se le negó el uso de la palabra a la oposición política en Colombia, conforme a los términos establecidos en el la Ley 5 y sus decretos reglamentarios, sería la primera vez que abiertamente se violan los términos de la misma en el recinto donde la ley misma fue elaborada y votada.

 [pullquote]Por ese motivo, el saboteo de los extremistas de izquierda, configura automáticamente un antes y un después en el orden constitucional y político del país, evidenciando un quiebre institucional sin antecedentes [/pullquote] recientes. Adicionalmente, pone al ejercicio de la democracia institucional en cuidados intensivos, si no son los mismos funcionarios autorizados para ello quienes se manifiesten contra los hechos sucedidos al negar la palabra a la oposición.

La situación evidentemente pone en evidencia el quiebre legal del país, y perfila la situación como un antecedente que evoca el comienzo de la tragedia humana y legal venezolana, ocurriendo ahora en territorio Colombiano.

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